Localización de software
Uno de los trabajos relacionados con el desarrollo de software es la de localización de software, que es como en el argot técnico se conoce a la traducción del software. Por ello, como ocurre con las páginas webs, es fundamental la separación de la programación, la funcionalidad, de la presentación. Esta presentación se ha de hacer pensando en que nuestro software puede ser traducido a cualquier idioma y debe seguir funcionando, independientemente del idioma que sea mostrado.
Esta localización de software requiere de traductores especializados, trabajo de correcciones, testeo y pruebas, y es que cualquier mínima equivocación puede dar al traste lo que se conoce como “experiencia de usuario”, tan fundamental para que nuestro cliente final, que es el que usa nuestro software, sienta que ese software esté bien hecho. Circunstancias como el uso de sinónimos o vocablos que no se usan en el castellano que se habla en España, pero que si son usados en el castellano que se habla en Latinoamérica hacen que sea cuasi-obligatoria esta separación de elementos.
Íbamos a recoger en nuestro blog una nota de prensa de la agencia de traductores madrileña Dixit en la que hablaba de que abrían un departamento de traducción de software, pero creemos que este post será mucho más interesante para nuestros lectores, y es que accediendo a su web nos hemos encontrado con los tipos de perfiles que son necesarios para traducir un software:
- Los coordinadores de testeo, que recogen la experiencia que los testers tienen de la aplicación traducida
- Los testers, que comprueban las funciones y el uso del software para que todo sea correcto. Son los que se encargan de comprobar que los menús están en su sitio, que en las alertas salen los mensajes correctos, …
- Los traductores, que son los que se encargan de traducir convenientemente este software
- Los revisores y validadores, que revisan el trabajo una vez que los traductores y testers hacen su trabajo
- El jefe de proyecto, que es el que se encarga de gestionar a todo el equipo anterior y de relacionarse con el cliente.
Aunque a simple vista los roles sean bastante diferentes, es fundamental que los profesionales que se quieran dedicar al mundo de la traducción sean brillantes conocedores de las dos lenguas implicadas, y es que, como ya hemos dicho, una mala traducción puede llevar la experiencia de usuario y aparecer imágenes chistosas como la que encabeza este artículo.